Ekj si Mennonite
Carreta menonita

Presentación

Nuestro estado grande cuenta con una riqueza cultural de gran relevancia a nivel nacional que suma la diversidad de sus pueblos indígenas, su protagonismo como cuna de la Revolución mexicana y el ser hogar de una cultura tradicionalmente nómada y conservadora surgida en Europa: los menonitas. A cien años de su llegada al estado de Chihuahua, han sabido crecer como una comunidad pacífica y próspera en lo que fue San Antonio de los Arenales, ahora ciudad Cuauhtémoc, y más hacia el norte, llegando hasta la frontera con los Estados Unidos. Sus diversas colonias cuentan con una gran gama de personalidades, todas unidas por la misma fe anabaptista y su entrega al pacifismo, el cual les ha arrastrado a ser mártires desde el siglo XVI en su travesía por el mundo, iniciando en los Países Bajos y Alemania, y pasando por Suiza, Ucrania y Rusia, Canadá, Estados Unidos y México hasta Belice, Paraguay y Etiopía. Su peregrinar les ha enriquecido también, puesto que han requerido de hablar no solo su lengua materna, el plautdietsch, sino a utilizar el alemán para los servicios religiosos y en sus escuelas privadas, por ejemplo; los hombres han usado primordialmente el inglés y ruso para el comercio durante sus migraciones, y el español al establecerse en estas tierras. Algunos menonitas de la comunidad en Chihuahua llegan a dominar hasta cuatro idiomas, de entre los que se cuenta el holandés. Cabe mencionar que una rama separatista de los menonitas conocida como los Amish se estableció principalmente en Pensilvania y Ohio en Estados Unidos y no comparten el plautdiestch, sino que tienen su propio idioma: el Pensilvania Dutch.

Ekj si Mennonite es una pequeña muestra fotográfica documental llevada a cabo desde Colonia Manitoba pasando por Swift Current, Jagüeyes, Santa Rita y El Sabinal con algunas personas que viven entregadas a su cultura con muy diversas formas de pensamiento ante la sociedad nacional e internacional, cada una con ideales y perspectivas positivas ante su propia realidad, pero temerosas de vivir en un país que “permite” la violencia en varios sentidos, misma que ha sobrepasado los límites de su pacifismo y sistema social en varias ocasiones. Se saben mexicanos y expresan orgullo de sus raíces, se esfuerzan diariamente para honrar su religión y a la familia ante todo, trabajan intensamente con la fortaleza de su puntualidad y sonríen cada vez que un mexicano les pregunta Woo geht die daut?

El 8 de marzo de 2022 los menonitas cumplieron cien años de presencia en Chihuahua. Son casi 50,000 hablantes de una lengua germánica que festeja su presencia en México compartiendo su historia y una sonrisa respetuosa.

Raúl Ramírez “Kigra”

Menno Simons

Menno Simons, ilustrado por Jan Luyken
De Menno Simons, Opera Omnia Theologica (Amsterdam, 1681)

Menno Simons fue uno de los principales líderes de los anabaptistas a inicios del siglo XVI.

Nació el año de 1496 en Witmarsum, en la provincia de Frisia, en el Sacro Imperio Romano Germánico (hoy Países Bajos). Inicialmente sacerdote católico, dejó la Iglesia al no compartir las actitudes y razonamiento de la institución, especialmente el bautismo a infantes, alegando que debería ser un acto de conciencia y verdadera entrega a la fe en Cristo. Su pasión por la palabra de Dios le llevó a ser muy admirado por los rebeldes anabaptistas en Europa y le reconocieron como uno de sus líderes más queridos, ganándoles el mote despectivo de menitas o menonitas.

Se cuenta con una gran cantidad de sus escritos, en los que explica como es que debe ser llevada a cabo la vida cristiana alejándose de la vanidad y el mundo materialista. Sus seguidores fueron perseguidos, torturados y asesinados por la Iglesia Católica al negarse a continuar la religión oficial; eso les convirtió en nómadas silenciosos con historias de mártires que reafirmaron su pensamiento pacifista.

Menno Simons falleció el 31 de enero de 1561, en Wüstenfelde, Holstein, en el Sacro Imperio Romano Germánico.

Personas


Lena es una artista, crea muñecas, hace carpintería, dibuja cuentos infantiles, cose vestidos que no encuentra comercialmente, se hace cargo de su jardín de hortalizas y tiene una app para aprender español. Se siente orgullosa de ser menonita mexicana y le encanta la comida de este país.

«Preferimos estar en paz, el trabajo es realmente lo que nos enseñan desde muy pequeños y en la vida real es un regalo de enseñanza tener esa práctica y ética de trabajo. La vida nos enseña desde pequeños que el trabajo es esencial y positivo. Siempre hay que jugar, pero ayudar a la mamá o aprender a preparar comida. Si crecen sin trabajar ya cuando sean adultos lo van a necesitar y ¿quién se lo va enseñar?»

«Es muy importante mantener el plautdietsch ya que es una manera de vivir. Hay muchos que se quejan de este movimiento ya que creen es retrasar nuestra comunidad, pero a mí me gusta porque es mi lengua nativa con la cual me siento a gusto».

Sobre las muñecas barbies comparte:

«dicen que las hacen en China, pero ahí la cultura no los permite vender, pero aquí se venden como loco y considero que es muy negativo jugar con una muñeca que promueve mensajes sin valor. Mi hermano dice que un mexicano le había dicho que un menonita o cristiano nunca debería tenerlas en su casa, que realmente representa una mujer inestable».



Verónica es una artista plástica especializada en la cerámica, apasionada de la naturaleza y un gran respeto a la tierra y la vida del campo. El haber vivido trece años en Vancouver, Canadá le abrió la visión de un mundo más ordenado y al mismo tiempo complejo, agradece al arte por abrirle los ojos sobre el sistema universal y reconoce de forma más conciente los roles del hombre y la mujer en su cultura menonita. Habla plautdietsch, español, alemán e inglés a la perfección y está convencida del gran valor de su lenguaje materno ya que representa la esencia de su cultura, la simplicidad de una comunidad que vive de la tierra. Admira a las mujeres de pasadas generaciones y las reconoce por medio de su cerámica utilitaria, honra el trabajo del menonita por medio de sus series artísticas más conceptuales que hablan de la energía vital que nos ofrece la tierra por medio de los alimentos y el trabajo del campesino.




Sofía no tenía mamá y fue adoptada por Martha y Francisco después de mucho papeleo y terapias familiares. Ella siempre anda sonriendo, jugando y cantando al lado de su hermana mayor, lo hace en plautdietsch y en inglés. Aunque Martha percibe que en la sociedad aún hay mucho racismo, no lo han sentido directamente y sabe que el color de piel no significa nada. En un inicio una parte de su familia no quería que adoptaran una niña de otra raza, pero ahora Sofía llena de alegría cualquier reunión familiar.

«Estamos muy agradecidos con Dios que nos dio este milagrito».

Sofía sabe que tiene otra mamá tarahumara en algún lugar, pero es muy feliz compartiendo los días con su nueva familia menonita y practica su español cuando voy a visitarla.




Johan nació en Zacatecas y se vino a Colonia Sabinal hace 29 años porque allá permitían troca, luz eléctrica, ya estaba muy lleno de gente y no había mucho terreno. Lo que más le gusta de su cultura es que utiliza el buggy, se encuentra alejado de la ciudad, tranquilo sin ruido, respetar la religión y que no se les permita ver la Tv porque tiene cosas que no son buenas para los niños y quiere que vivan tranquilos. Le encanta la Navidad en familia y lo festejan por tres días con comida y leyendo la Biblia. Sabe que hay buenas culturas en el mundo pero la menonita le gusta mucho para que Jesús los salve para ir al cielo. Le han platicado sobre el internet pero no lo conoce, sabe que se puede usar para muchas cosas, para hacer negocios y tener contacto de lejos. Aunque tiene familia en Canadá no puede ir a visitarlos porque no tiene pasaporte y se siente a gusto en México, tiene buena relación con los tarahumaras y los "oaxacos". Su niña mayor está ya en edad para dejar la escuela y ayudar en la casa, los niños aún tienen dos años más en la escuela y luego trabajarán con el haciendo pozos.



Sara es madre de familia y trabaja todo el día cosiendo vestidos, tejiendo toallas, haciendo el libro genealógico de la familia, cocinando, atendiendo la granja y sus parcelas. En invierno es común que tenga hasta 30 jamones curando con sal para ahumar con encino rojo en el horno detrás de la casa.

«En verano yo crío los puercos y unas gallinas. Si los trato de vender vivos nadie me las compra, pero el día que los destazamos y los pongo en venta todas las mujeres jóvenes vienen y me los compran casi al instante. Es el trabajo que ya no quieren hacer la generación joven, el trabajo 'sucio', en mi caso me ven como señora sucia por el trabajo que realizo porque no entienden de donde viene su comida».

Considera que el plautdietsch es muy importante porque "es nuestra identidad". Sobre el libro genealógico dice:

«Me apasiona hacer los libros con fotos, necesito tener mi mente activa, creo que son ejercicio para tener la mente saludable. Con estos proyectos me siento más válida y satisfactoria al final del día porque pudiera estar sentada y pensar en todo lo triste que está pasando en nuestro alrededor pero con este libro aprendo quien soy, me divierto y distraigo mucho».



Peter nació en Nuevo Ideal, Durango pero ahora vive en Colonia Sabinal, se levanta siempre muy temprano junto con sus dos hijas que aún no se casan para ordeñar las vacas y hacerle a la mecánica con algunas trocas de los vecinos. Es lo único que anda haciendo estos últimos años ya que no ha podido sembrar algodón y sorgo porque el diésel está muy caro y no se permite la luz eléctrica en Colonia Sabinal. Habla plautdietsch en la casa y alemán en la iglesia, para el trabajo utiliza el plautdietsch y español. Aunque aún utiliza el buggy para transportarse y cuida sus caballos, sí quiere que llegue la luz a la colonia para poder trabajar mejor y comparte que muchos que aún se rehúsan se fueron a vivir a Campeche.



Chrysta es una maestra de 5º y 6º de primaria, nació y creció en Colonia Jagüeyes y considera que es bueno que los menonitas hayan migrado de Canadá a México en 1922 ya que admira a las personas que tienen visión a futuro y se arriesgan a lo desconocido para crear algo de la nada. En casa habla plautdiestch, en el trabajo alemán, inglés y español y considera muy importante que los jóvenes sigan hablando su lengua materna a pesar que prefieren el inglés. Para ella es muy importante la evangelización sin importar de que cultura sea, especialmente para los jóvenes. Comparte que hay muchas culturas dentro de los menonitas, no todos caben en una misma caja.

«Es valioso conocer tu cultura, tu historia y los errores así como lo bueno, para usarlo y aprender de ello para mantener tu identidad y saber quién eres».


Marcela es conocida en las redes sociales como Dietsche Mejal, su personaje tradicional que por medio de la sátira ha sabido hacer un homenaje a su cultura menonita en su lengua materna, el plautdiestch, así como con un canal alternativo en español. Al principio fue mal vista en la comunidad ya que creían que era burla pero luego recibió mensajes comprensivos sobre su intención de difundir su forma de vida. Además de su lengua materna habla español, inglés, alemán y está aprendiendo holandés para platicar con su familia en Países Bajos. Se siente orgullosa de ser menonita mexicana, ya que su cultura se basa en el pacifismo y se les inculca mucho el trabajo desde pequeños para ser responsables desde una edad temprana. Lo que no le gusta es la violencia que existe en nuestro país. Considera importante que hubiera más medios para mantener vivo el plautdietsch en especial entre los jóvenes y que exista un balance de los roles entre hombre y mujer, que sean más independientes, educarse y abrirse al mundo.




Itali estudió periodismo y se siente una orgullosa menonita mexicana. Su tatarabuelo fue uno de los seis delegados de la comunidad menonita que negoció la migración con el presidente Álvaro Obregón. Siente que los menonitas han creado una gran comunidad a los cien años de su llegada, han sabido preservar su cultura y han aportado mucho a la economía de la región. En casa habla inglés mezclado con español y plautdiestch según el ánimo en el que anden, en la iglesia el alemán y expresa una preocupación ya que las nuevas generaciones hablan más inglés que plautdiestch. Considera que tradicionalmente el rol del hombre y la mujer ha sido muy marcada como en todas las religiones pero no cree que todas las mujeres que son amas de casa sean miserables, pero sí es necesario que tengan más opciones como asistir a la universidad.

«Los menonitas somos todos diferentes, compartimos gastronomía, vestimenta, idioma pero cada cabeza es un mundo, no porque un menonita haga una cosa quiere decir que otro lo va a hacer, hay mucha diversidad también en los menonitas».


Leona es una enfermera y partera de Colonia Jagüeyes entregada a su comunidad, habla plautdiestch, alemán, español e inglés ya que sus estudios de enfermería los realizó en el Hospital Palmore de Chihuahua y en Manitoba en Canadá. Ha asistido en más de 900 partos y recuerda con gran cariño su infancia en la granja, con animales, jugando afuera y ayudando a mamá con la familia de diez hijos. Considera muy importante la relación con los mexicanos ya que cuentan con cosas que no tienen como servicios médicos especialistas, dentistas y otras cosas. Se siente orgullosa de ser menonita mexicana y le gusta mucho vivir en México por el clima y la gente tan amable, pero al igual que todos no le gusta la corrupción tan marcada, le han dicho que el presidente no regresa el dinero de los impuestos.

«En esta colonia desde la iglesia no está permitido tomar y fumar y eso nos ayuda mucho a nosotros, pero esto no es de fe, nuestra fe es en Jesucristo, él nos ayuda a vivir una buena vida, eso es una cosa que no es una buena cosa para la salud. Mis abuelos llegaron porque allá (Canadá) no les permitieron tener sus escuelas de la manera cristiana donde se imparte la Biblia, por eso llegaron para acá».


Vínculos

Un nuevo hogar para los menonitas de la Vieja Orden, artículo publicado en el número 42 de la revista digital mirada ferroviaria publicada por la Secretaría de Cultura, a través del Centro Nacional para la Preservación del Patrimonio Cultural Ferrocarrilero, por medio del Centro de Documentación e Investigación Ferroviarias.

Menno Simons (1496-1561), en Global Anabaptist Mennonite Encyclopedia Online (en inglés).

Menonitas de Rusia, en México, donde se menciona la "Carta de Concesión" (facsimilar a continuación):

Carta de Concesión
(facsimilar)
firmada el 25 de febrero de 1921 por el Presidente General Álvaro Obregón y el Secretario de Agricultura y Fomento, General Antonio l. Villarreal;
certificada por el Subsecretario de Relaciones Exteriores, Aarón Sáenz Garza (firma casi ilegible).
Otra carta
(facsimilar)
firmada el 30 de octubre de 1921 por el Presidente General Álvaro Obregón y el Secretario de Agricultura y Fomento, General Antonio l. Villarreal.